La Milagrosa procesionará un misterio desconocido en Sevilla

La iconografía no es la de un Cautivo al uso, sino la de un Jesús preso, conducido por los sirvientes del Sanedrín a casa de Anás. El Señor de la Esperanza en el Puente Cedrón, cuyo boceto se presentó ayer, será la piedra angular de un misterio que promete ser de impacto.

Se bendecirá en septiembre y será el titular cristífero de la recién creada agrupación parroquial de La Milagrosa, en Ciudad Jardín. El imaginero Navarro Arteaga ha ideado un Cristo doliente, de mirada pensativa y de zancada muy poderosa para plasmar el momento en que, tras ser apresado en el monte de los Olivos, Jesús es conducido a casa de Anás cruzando el puente Cedrón.

El Señor cruzará calzado las piedras del puente (no irá descalzo), llevará uno de los hombros al descubierto y una lágrima recorrerá su mejilla derecha “representando el dolor de la traición que acaba de recibir y los momentos que le va a tocar vivir a partir de ese instante”. Le acompañarán en la composición dos sirvientes del Sanedrín, armados con espadas y palos, un tribuno a caballo, un sanedrita (José de Arimatea), y un niño con un perro ladrando al cuadrúpedo romano, personaje éste que, según Javier de Martos, vicepresidente de la agrupación parroquial, aparece en los Evangelios representado como “un joven que, ataviado con una túnica, permanece siempre en la escena como en un segundo plano”.

Navarro Arteaga asegura sentirse “muy ilusionado” con este proyecto, ya que se trata de “un misterio no representado hasta ahora en la Semana Santa de Sevilla” y prácticamente inexistente en España. “Sólo hay un misterio así en Málaga capital, con tres figuras, el de la Hermandad de los Dolores del Puente, pero el puente apenas se ve”. En este caso, la pasarela sí será visible, ya que el Cristo se sitúa justo en la cima del puente. Navarro Arteaga anda dándole vueltas incluso a la posibilidad de representar el agua del torrente Cedrón. “Hay muchas fórmulas”, dice conciso.

A finales de mes se presentará el boceto del misterio con todas las figuras secundarias. El imaginero está seguro de que la del Señor de la Esperanza “va a ser una de las imágenes impactantes de este nuevo siglo”, trabajo en el que derrochará toda su sapiencia y en el que promete “introducir caractereres nuevos en la forma del trabajo y en la composición de las imágenes”.

Navarro Arteaga ha concebido un Cristo de zancada muy poderosa, lo que contribuirá a que “el andar de esta imagen sea muy espectacular”.

La nueva agrupación parroquial de Ciudad Jardín, con una clara vocación de hermandad de penitencia, ha bautizado al Cristo con la advocación de Esperanza en honor al barrio, pero también en recuerdo de una vieja hermandad que nació en Sevilla en 1724 y que se llamó Venarable Congregación del Santísimo Cristo de la Esperanza y Santo Celo por la Salvación de las Ánimas.